Lo cierto es que existen diferentes tipos de papel pintado, cada uno con características específicas que se adaptan a diferentes necesidades. Hoy te contamos sus detalles más importantes.
Tipos de papel pintado
Papel pintado tradicional. Quizá es el modelo más asequible y está formado por una fina capa de papel sin revestimiento protector. Está indicado para espacios de poco tránsito y lo ideal es que se limpie en seco.
Papel pintado vinílico. Puede ser que sea la opción más utilizada hoy en día debido a su resistencia. Está cubierto de una capa vinílica que lo protege de la humedad y lo hace fácil de limpiar. Es resistente al vapor, al calor, a la humedad, a los rayos solares y a los roces, por lo que está indicado para zonas de mucho tránsito, incluidos los baños y la cocina.
Papel pintado no tejido. Está compuesto por fibras de celulosa y poliéster, lo que lo hace resistente a la humedad y fácil de limpiar. Es adecuado para cualquier tipo de estancia y se puede colocar sobre cualquier superficie.
Papel pintado de fibras naturales. Está hecho de fibras naturales o sintéticas y tiene una textura suave y agradable al tacto. Es adecuado para estancias con poco tránsito y lo más aconsejable es que se apueste por la limpieza en seco.
¿Qué tener en cuenta para elegir el tipo de papel pintado?
Para elegir el tipo de papel pintado que mejor se adapte a las necesidades, es importante considerar algunos aspectos como el lugar donde se va a colocar, el nivel de uso que tendrá la zona o estancia. También es importante considerar el estilo decorativo que se desea lograr y la combinación con otros elementos de la estancia.
Resumiendo desde Toral Decoración creemos que la elección del tipo de papel pintado dependerá de las necesidades y gustos personales de cada uno. Aunque siempre puedes contar con nuestro asesoramiento para acertar en tu elección.